Nada es eterno, ni siquiera el branding, que de vez en cuando necesita pasar por el quirófano para hacerse un “lifting” y recuperar la lozanía perdida. Durante los últimos doce meses varios logos de grandes marcas han decidido ponerse en manos de “cirujanos”, con mejor y peor resultado, plantarle cara al inevitable paso del tiempo.
En algunos casos la “cirugía” ha sido más bien imperceptible y se ha quedado en un mero retoque, pero en otros los logotipos han salido del quirófano con rostros totalmente irreconocibles.
Estrenar nuevo “look” es una decisión arriesgada que no todas las marcas se atreven a tomar. Estas fueron algunas de las valientes que se animaron a hacer un lavado a su cara a sus logos a lo largo de 2014: