El objetivo de la imagen corporativa es simple: se debe crear una personalidad diferenciada, exclusiva y global. Debemos tener en cuenta todo lo relacionado con la marca, la denominación de origen e incluso las propias instalaciones de la empresa. La imagen corporativa o de marca es la que se percibe y se transmite a través de la comunicación.
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Todo esto nos puede posicionar en la mente del consumidor y puede aportar un valor a nuestra marca. De esta manera, reflejamos la visión y la misión de nuestra empresa. Algunos de los elementos más importantes que debemos tener en cuenta son:
- El nombre de la empresa
- El logotipo (logotipo e imagotipo)
- El eslogan
- El sitio Web
- Los documentos corporativos
Para poder dar un valor añadido a nuestra marca debemos tener muy claro QUÉ queremos comunicar y CÓMO queremos que llegue a nuestros clientes. Se deben probar formas, colores, imágenes y decidir después cuál es la más apropiada tanto para la empresa, como para el producto o el servicio que se está ofreciendo.
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Antes de nada, debemos llevar a cabo la determinación de nuestro target, teniendo en cuenta aspectos tan fundamentales como la edad, el sexo, el hábitat, el aspecto socioeconómico y sociolaboral y el tiempo de ocio de cada individuo.
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Paul Capriotti habla de cuatro escenarios estratégicos diferentes que debemos tener en cuenta para crear nuestra imagen corporativa:
- Cuando no hay un referente de Imagen corporativa o institucional
- Cuando nuestra empresa o institución es referente de Imagen
- Cuando hay un referente débil de Imagen
- Cuando hay un referente fuerte de Imagen
El buen logotipo debe ser sencillo, motivador y comprensible. Debe funcionar en tamaños grandes o pequeños, en blanco y negro y en todo tipo de soportes. Se debe crear para que el público lo entienda, con perdurabilidad en el tiempo y siempre cumpliendo las normas evitando que sea ofensivo o que ya esté registrado.
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La tipografía debe ser clara, y aunque juguemos con ella debe ser legible. Los colores también son muy importantes y antes de decidirlos debemos fijarnos en el significado de cada uno de los que vayamos a utilizar. No debemos dar lugar a confusión, ya que muchos colores evocan sentimientos y emociones contrarias a las que podemos imaginar.
Por último, y una vez ya creado el logotipo y aplicado a todos los soportes necesarios se debe generar el Manual de Identidad Corporativa. Este manual “debe recoger la personalización, impresa y gráfica, de un conjunto de normas homogéneas que aúnen cada una de las actuaciones de comunicación de la empresa o institución” (Fernando Martín Martín).
Si quieres saber saber como dar valor a tu marca potenciando la imagen corporativa de tu empresa, contacta con nosotros.