En una reciente encuesta publicada por la consulora McKinsey & Co se indica que el 60% de los altos ejecutivos considera que fomentar el engagement es una prioridad en las estrategias digitales de su negocio. Dicha estrategia implica un crecimiento desde el 55% registrado el año pasado, o un 46% del periodo anterior. Según el estudio, la apuesta por la estrategia digital continuará en aumento. El 35% de los encuestados considera que, al menos el 15% de sus empresas crecerá en los próximos años gracias a su estrategia digital.
¿Cuáles son los objetivos principales de la estrategia digital de las empresas?
Los datos muestran un gran interés por fomentar el engagement con los clientes. El 69% de los participantes en el estudio sitúa este objetivo en el top 3 de su escala de prioridades. Comienza así una era hacia la conquista del cliente y una preocupación por mejorar su experiencia con la empresa.
En esta escala de valores, encontramos en un lugar preferencial la necesidad de apostar por la innovación y las ventajas del medio digital, a todas las áreas de la empresa. Así opina el 64% de los encuestados.
De otro lado, el Big Data está presente en este top 3. En plena era digital, es imposible permanecer indiferente ante la gran cantidad de información y datos relevantes que circulan a nuestro alrededor. Una corriente numérica con gran capacidad para ayudar a las empresas a conocer mejor a sus clientes y, proporcionarles una experiencia que sea 100% satisfactoria para el cliente. Hay que conocer al cliente lo mejor posible para ofrecerle el producto que está buscando.
¿A qué problemas se enfrentan estas empresas?
Especialmente debido a la necesidad de desentrañar los misterios del Big Data y el comportamiento digital de los usuarios. Datos básicos para desarrollar una estrategia digital efectiva, orientada a las necesidades del público objetivo.
De otro lado, la falta de habilidades digitales por parte del personal de la empresa continúa siendo un obstáculo. Aunque parezca poco creíble por la época en la que vivimos, muchos de los empleados de las empresas no están familiarizados con la tecnología, ni conocen el poder de alcance que tienen las Redes Sociales hoy en día y ni si quiera saben lo que los clientes opinan de su marca. El Big Data bien manejado es el mejor instrumento para captar clientes que una empresa puede tener. Todos los datos que hoy en día los consumidores van aportando a las empresas son pistas fiables de lo que necesitan y quieren y es ahí donde las empresas deben centrar sus esfuerzos para dar al cliente lo que busca.